Imagine Creativity Center es un centro de creatividad e innovación que organiza viajes de innovación disruptiva por todo el mundo en los que personas muy distintas trabajan en equipo para dar soluciones a los retos propuestos por los patrocinadores. Su fundador es Xavier Verdaguer, un emprendedor en serie español que vivió durante varios años en Silicon Valley y se enamoró de la actitud y la ambición de la gente por llevar adelante proyectos que cambien el mundo.
Imagine nació en 2011 con un programa de un mes en Silicon Valley con el objetivo de que los participantes, llamados Dreamers, aprendieran trabajando y desarrollando ideas para los patrocinadores y, al mismo tiempo, hicieran una inmersión en el ecosistema más innovador y emprendedor del mundo. Tras varios años realizando el programa y aprendiendo de esta experiencia de unir talento muy diferente y crear equipos que generan grandes ideas, Imagine ha ido lanzando nuevas ediciones como Imagine Express, Imagine 7 Islands o Imagine Latam, entre otros.
Durante el pasado mes de julio tuve la suerte de participar en Imagine Silicon Valley 2016 desarrollando un proyecto de innovación disruptiva en representación de Cuatrecasas Gonçalves Pereira, en su calidad de patrocinador del programa. Cuatrecasas es uno de los referentes en la abogacía de los negocios en España y Portugal y la primera firma de abogados en participar en este programa de innovación.
He tenido la oportunidad de convivir y trabajar con un equipo de Staff y Dreamers increíble en Hero City, un centro de coworking en Draper University. Asimismo, durante nuestra estancia visitamos algunas de las principales empresas tecnológicas del Valle, como Google, Facebook, Twitter, AirBnB, Pinterest y Dropbox, entre otras. También realizamos actividades en las universidades de Stanford y Berkeley y conocimos a personalidades relevantes como Angelika Blendstrup, Joaquim Trias, Daniel Kottke y Jordi Argente, entre otros muchos.
Puedo decir que gracias a esta experiencia he descubierto personas, lugares, culturas, empresas y tecnologías que han potenciado una gran creatividad en mí, hasta el punto de haber liderado un proyecto de Blockchain y Smart Contracts en un ámbito de actividad que me era completamente ajeno –el comercio internacional de mercancías– y que implica conocimientos de diversas áreas y un trabajo muy diferente a mi día a día como abogada.
Blockchain, al igual que muchas de las nuevas tecnologías del futuro, es una tecnología transversal que tiene el potencial de transformar múltiples sectores y que, por ende, requiere de soluciones integrales. Es por ello que, como abogada, haber tenido la oportunidad de desarrollar nuevas habilidades y de trabajar de forma multidisciplinar, con personas de gran talento, en un ecosistema como Silicon Valley me ha abierto la mente a una forma diferente y apasionante de trabajar y de vivir. Precisamente, uno de mis sueños profesionales siempre ha sido innovar en uno de los sectores más conservadores que existen, el sector legal.
En mi opinión, el modelo de Imagine de unir a personas con ilusión, talento y habilidades muy diferentes –tanto por lo que respecta a su edad y experiencia, como a su profesión– para buscar soluciones innovadoras a retos de los patrocinadores, aunando el trabajo, la interacción y diversión en equipo y el descubrimiento de cosas nuevas, es la forma de trabajar que imperará en el futuro.
A continuación destacaré cinco aspectos comunes que considero contribuyen al éxito del modelo de Imagine y de las empresas tecnológicas de Silicon Valley.
1. La actitud de las personas
Una de las claves de Imagine es la selección de sus participantes, los Dreamers, quienes, con independencia de su edad, experiencia y profesión, deben responder a un patrón común: tener ilusión por aprender y crear cosas nuevas en equipo, ambición y ganas de cambiar el mundo, una actitud positiva ante los retos, capacidad de trabajo, tenacidad, responsabilidad, compromiso y generosidad. La actitud es esencial y en Imagine se respira una actitud muy positiva y pasión por aprender, cambiar el mundo y compartir.
En este sentido, si hay algo que marca la diferencia de Silicon Valley con respecto al resto del mundo es precisamente la actitud de las personas. Las empresas tecnológicas buscan contratar a personas inteligentes, trabajadoras, creativas, con determinación, sin miedo a probar cosas nuevas y equivocarse y que trabajen bien en equipo. De hecho, en muchos casos prefieren adquirir startups e integrar sus equipos que hacer procesos de selección costosos para acabar contratando a una persona que realmente no saben si va a encajar trabajando en equipo y en su cultura. Asimismo, sus empleados son personas que, por lo general, lo que valoran es trabajar con personas brillantes, que les inspiren y con las que disfruten trabajando.
2. Generar el entorno propicio para innovar
Imagine diseña viajes de innovación que te sacan totalmente de tu zona de confort, de tal forma que se genera el entorno propicio para crear ideas innovadoras. Este modelo, que aúna trabajo, ocio y aprendizajes –aprendizajes no estrictamente sobre tu profesión ni tu cultura, sino sobre otras profesiones, lugares y personas muy diferentes– constituye la esencia de la innovación. La ideación ha de ser multidisciplinar, incluyendo una parte divergente, no conectada con tu reto, y convergente, conectada con el mismo. Si solamente tienes en cuenta información conectada exclusivamente con el reto que intentas resolver, la solución no será muy innovadora. A mayor divergencia, mayor es el potencial de desarrollar ideas innovadoras. De hecho, las mejoras ideas suelen provenir de profesionales que no son expertos en esa área. Un ejemplo de ello se puede ver en el sector legal, donde la disrupción está viniendo de profesionales de fuera del sector.
A este respecto, en las principales empresas tecnológicas del Valle, los profesionales proceden de diversos campos profesionales y, entre todos, hablan decenas de idiomas. Representan al público global para el que trabajan. Esta diversidad es muy positiva para la interacción y la generación de ideas. Asimismo, los espacios de trabajo y cafeterías están diseñados para promover la interacción entre profesionales y favorecer las conversaciones de trabajo y los juegos.
3. Diseñar estructuras horizontales y flexibles
Una de las cosas que me ha sorprendido de Imagine es que todos, Staff y Dreamers, con independencia de la edad –que variaba desde los 15 hasta los 45 años– y experiencia, éramos tratados por igual a la hora de compartir nuestras ideas y opiniones. Este modelo horizontal permite crear lazos muy importantes entre las personas y es un mecanismo de gran retención del talento para las organizaciones.
De hecho, es algo a lo que también se da gran importancia en las empresas tecnológicas visitadas. En efecto, a pesar del gran crecimiento que han experimentado en tan pocos años, se han esforzado por mantener esa cultura abierta que se suele dar en los inicios de una empresa cuando todo el mundo contribuye de forma práctica y se siente cómodo al compartir sus ideas y opiniones. Le dan gran importancia a aprender de los errores y anteponen la capacidad de trabajo a la experiencia.
Asimismo, los empleados valoran la flexibilidad y la horizontalidad y, por ende, la confianza que depositan en ellos, así como todos los beneficios y facilidades que les ofrecen. De hecho, cuentan con equipos específicos que se encargan de asegurar la felicidad de los profesionales.
4. Crear equipos para resolver retos comunes
Considero que un elemento fundamental del éxito de Imagine es que se crean equipos específicos para resolver un reto concreto, por lo que sus miembros tienen un objetivo común y se sienten totalmente implicados en su solución. De lo contrario, es muy difícil que profesionales de diferentes disciplinas, que no están acostumbrados a trabajar juntos puedan hacerlo y sean capaces de innovar.
A este respecto, en las empresas tecnológicas trabajan en muchos casos en pequeñas startups de forma multidisciplinar y con gran flexibilidad. Asimismo, realizan concursos internos anuales para presentar nuevas ideas y proyectos y las propuestas ganadoras se desarrollan posteriormente dentro de la compañía.
5. La creatividad se desarrolla con método
Otra de las cosas que he aprendido de Imagine es que la creatividad y la capacidad de innovar se aprenden con método. Todos podemos ser creativos e innovar. Como nos decía Javier Ideami, es un músculo que debemos entrenar. Tenemos el potencial de convertirnos en lo que soñamos ser. Ese es precisamente uno de los objetivos de Imagine, potenciar el talento y la creatividad de las personas que participan en sus programas.
Por otro lado, las personas que trabajan en las principales empresas tecnológicas en el ecosistema más emprendedor del mundo han llegado tan lejos por su esfuerzo y su ambición, de igual forma que yo he podido participar en este programa. A este respecto, una de las cosas que me llamó la atención es el número de profesionales españoles liderando proyectos en algunas de las principales empresas tecnológicas del Valle. Ello demuestra que podemos llegar donde soñemos. Los límites nos los marcamos nosotros mismos.
En relación con este punto, otro aprendizaje a destacar es que no debemos tener miedo a compartir nuestras ideas. Lo importante es la ejecución y compartiendo podemos testear nuestra idea y sumar con las ideas de los demás.
Finalmente, en mi experiencia previa, me he dado cuenta de que escribir me ayuda a reflexionar y aprender. Esto es algo a lo que también se da importancia en Silicon Valley, donde están más acostumbrados a, por ejemplo, realizar actas de todas las reuniones. Como nos decía David Urbano en una de las visitas, lo que no se escribe no se queda grabado, por lo que no aprendemos.
En definitiva, considero que Imagine ha diseñado un modelo capaz de crear el entorno clave para despertar y potenciar la inspiración, la creatividad y la ilusión por perseguir los sueños de las personas que comparten estos viajes de innovación. Ello, a su vez, permite el desarrollo de soluciones de innovación disruptiva para las empresas que patrocinan sus programas y promueve el intraemprendimiento.
En mi opinión, este modelo será el que imperé en el futuro en las organizaciones, como ya ocurre en las principales empresas tecnológicas del mundo, ya que genera los entornos propicios para innovar. Ello es clave para mantener una ventaja competitiva en cualquier mercado.
Quisiera agradecer, en primer lugar, a Cuatrecasas, y especialmente a nuestro presidente Rafael Fontana y a nuestro CIO Francesc Muñoz, la confianza depositada en mí para este proyecto. Me siento orgullosa de formar parte de una firma que representa muchos de los valores referenciados, especialmente en cuanto a otorgar voz a los más jóvenes y participar en proyectos de innovación como Imagine. También agradecer al equipo de Bergé su implicación y el gran ejercicio de co-creación realizado con ellos.
Por último, pero no por ello menos importante, quisiera agradecer a la organización de Imagine, especialmente a su fundador Xavier Verdaguer, que es un modelo de inspiración para todos, y al resto de Staff y Dreamers la oportunidad de haber compartido con todos ellos esta experiencia. Ahora tengo la suerte de formar parte de la gran familia que es Imagine porque, como dice Xavier, haber participado como Dreamer en uno de los programas es solo el principio.
¡Muchas gracias a todos!
No os perdáis a continuación el video resumen de esta experiencia realizado por Berta Vicente Salas:
Abogada en Cuatrecasas, Gonçalves Pereira